Donald Trump y seguridad alimentaria

Donald Trump y la seguridad alimentaria: lo que su regreso supondrá para las exportaciones.

El regreso de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos el 20 de enero de 2025 marca el inicio de un nuevo escenario económico que podría influir en las relaciones comerciales entre Europa y Estados Unidos. Pero los cambios parece que no sólo van a afectar a lo económico, y es que todo hace prever que habrá cambios en la relación entre Donald Trump y la seguridad alimentaria, y que tendrá un impacto en las exportaciones y, en general, la industria agroalimentaria.

Todo ello son, en gran medida, suposiciones. Pero gran parte de la campaña del polémico magnate se basa en una política anunciada por el propio Trump y sus partidarios en mítines y declaraciones públicas con énfasis en priorizar los intereses estadounidenses. Como os podéis imaginar, se ha generado incertidumbre en sectores como el agroalimentario, particularmente para España, donde el peso de esta industria es considerable.

Hay que tener presente que, en lo tocante a las exportaciones de alimentos a Estados Unidos, España ocupa el puesto 19 y tiene una cuota de mercado del 1%. Un porcentaje nada desdeñable teniendo en cuenta que se trata de un mercado de 335 millones de habitantes. Visto desde el lado español, en 2022 las exportaciones agroalimentarias y pesqueras de España a Estados Unidos supusieron el 4,7% del total de exportaciones de ese sector realizadas por España a todo el mundo.

Por otro lado, las importaciones de alimentos y productos pesqueros procedentes de Estados Unidos supusieron el 3,8% del total de las importaciones españolas. A nivel mundial Estados Unidos ocupa el séptimo puesto como destino de nuestras exportaciones y el noveno como origen de nuestras importaciones en ese ámbito.

Donald Trump Seguridad alimentaria

Promesas electorales y primeras acciones de Donald Trump en materia comercial.

Lo que la industria alimentaria puede esperar del gobierno de Trump.

Desde su campaña electoral, Trump dejó claro que su política comercial giraría en torno a su conocido mantra “America First”, una estrategia destinada a reducir el déficit comercial y reforzar la industria nacional.

Entre las primeras medidas planteadas se destaca la revisión de los acuerdos comerciales existentes y el aumento de aranceles a productos europeos, incluyendo alimentos y bebidas procedentes de España.

El sector tiembla, y es que, según un artículo de EFE Agro, la posible imposición de nuevos aranceles por parte de Estados Unidos pone en alerta a exportadores de sectores estratégicos como el aceite de oliva, el vino y los productos cárnicos. Estas restricciones podrían afectar la competitividad de los productos españoles en el mercado estadounidense. El ministro español Planas, se ha mostrado prudente hasta que estos supuestos se confirmen, es partidario de hacer un seguimiento de “cerca” para juzgar “las cosas por los hechos”.

Impacto del regreso de Trump en las exportaciones alimentarias españolas.

El sector agroalimentario español depende en gran medida de las exportaciones, y Estados Unidos es uno de los principales destinos fuera de la Unión Europea. Productos emblemáticos como el aceite de oliva, el vino y el queso podrían enfrentar barreras arancelarias significativas.

Un informe de El Economista destaca que el sector porcino teme las consecuencias de un posible arancel del 25% sobre productos clave. Este incremento encarecería el precio final para los consumidores estadounidenses, reduciendo la competitividad de los productos españoles.

Por ejemplo, el sector porcino, que exporta cortes premium a Estados Unidos, podría ver reducida su cuota de mercado debido a estas medidas. Según declaraciones recogidas en EFE Economía, los productores españoles están buscando diversificar sus mercados y fortalecer relaciones con Asia y América Latina para mitigar el impacto.

Si desgranamos por provincias o autonomías, es pronto para saber el impacto, pero ya hay medios, como La opinión de Málaga que se aventuran a valorar en 300 millones el impacto en la provincia.

Acciones de la Unión Europea ante el cambio de escenario.

Mientras Estados Unidos adopta medidas proteccionistas, la Unión Europea continúa apostando por la apertura comercial y la sostenibilidad. Las regulaciones europeas se enfocan en garantizar altos estándares de calidad y seguridad alimentaria, lo que representa una ventaja competitiva en mercados globales exigentes.

Esta diferencia de enfoques podría profundizar las tensiones comerciales entre ambas regiones. Un artículo de Infobae advierte que la UE podría responder a los aranceles estadounidenses con medidas similares, creando un entorno comercial menos predecible.

Retos y oportunidades para España

En este contexto de incertidumbre, los exportadores españoles enfrentan múltiples retos, pero también tienen la oportunidad de reinventarse. Entre las estrategias clave se encuentran:

·       Diversificación de mercados: Fortalecer la presencia en mercados alternativos como Asia y América Latina.

·       Incremento del valor añadido: Promover productos con denominaciones de origen y certificaciones que resalten la calidad y autenticidad españolas. No hay una mejor respuesta a los aranceles que productos de calidad.

·       Digitalización: Ampliar el alcance mediante plataformas de comercio electrónico y marketing digital.

La influencia del retorno de Donald Trump a la presidencia sobre la regulación en materia alimentaria.

En el momento de escribir este artículo, sabemos que la administración entrante ha nombrado a Robert F. Kennedy (RFK) Jr. para secretario del Department of Health and Human Services, a Martin Makary para comisionado de la FDA, y a Brooke Rollins para secretaria de Agricultura.

Si se confirma, Kennedy, Makary y Rollins heredarán varias iniciativas regulatorias de alimentos en curso tanto en la FDA como en el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA) en medio de un panorama regulatorio de alimentos teñido por el auge del movimiento Make America Healthy Again (MAHA) del presidente electo Donald Trump.

Trump prepara un mosaico cada vez mayor de prohibiciones estatales de aditivos alimentarios, la reciente creación del Programa de Alimentos para Humanos (HFP) de la FDA y mayores preocupaciones de los consumidores en torno a los llamados alimentos “ultraprocesados”.

En este contexto, se podría anticipar que tanto la FDA como el USDA centrarán la atención política de una manera que puede que no tenga precedentes con múltiples puntos de influencia en la Casa Blanca, el Congreso y dentro de las propias agencias.

Cómo afectará la presidencia de Donald Trump a la seguridad alimentaria.

Aunque pueda parecer aventurado por nuestra parte, además de los mencionados, se prevén cambios en otros aspectos:

1.      Presencia de químicos en alimentos.

Como acabamos de mencionar, la administración Trump intensificará los controles a sustancias químicas presentes en los alimentos.

Es esperable que la FDA de, con Trump en la Casa Blanca, intensificará su creciente atención a la evaluación posterior a la comercialización de las sustancias químicas en los alimentos. Sin ir más lejos, y aún con Trump sin ser investido presidente, el 15 de enero de 2025, la FDA anunció la revocación de la autorización para el uso de eritrosina.

El polémico Robert F. Kennedy ya ha mostrado su preocupación sobre aspectos como colorantes, sustancias en contacto con alimentos, aditivos y contaminantes en los alimentos.

2.  Nutrición: Make America Healthy again.

Como ya os hemos comentado, se esperan mayores esfuerzos por parte de la administración y la FDA sobre una variedad de temas importantes relacionados con la dieta y la salud, incluidos los alimentos ultraprocesados, el etiquetado nutricional en el frente del paquete, la reciente norma final de la FDA sobre “saludable” y nuevas pautas dietéticas, entre otros.

3.      Carne cultivada y nuevas proteínas.

Probablemente se viva un aumento de la atención a la seguridad y el etiquetado de la carne cultivada (cultivada con células). El Servicio de Inocuidad e Inspección de Alimentos (FSIS) del USDA ha manifestado su intención de publicar una norma propuesta que establezca nuevos requisitos para el etiquetado de productos de carne o aves de corral elaborados con tecnología de cultivo de células animales, junto con una directriz correspondiente.

Sin embargo, a la luz de la reciente politización de la carne cultivada en ciertos estados de EEUU, como Florida y Alabama, queda por ver si la política determinará el momento y el contenido de cualquier norma propuesta o declaraciones futuras sobre este tema, y ​​en qué medida.

Lo mismo ocurre con la orientación de la FDA que se encuentra actualmente en desarrollo con respecto a las consultas previas a la comercialización de alimentos de células animales cultivadas.

4.      Etiquetado de alimentos de origen vetegal.

También prevemos que la FDA puede revisar la denominación y el etiquetado de los alimentos de origen vegetal a pesar de la reciente publicación de una guía de la FDA sobre este tema en los últimos días de la administración Biden. La denominación de los alimentos de origen vegetal ha sido un tema de acalorado debate y ha dado lugar a nuevas leyes en Missouri, Texas y Mississippi, entre otros estados.

5.      Trazabilidad.

Agárrense que vienen curvas. La FDA va a cambiar su normativa, esto no es nuevo, y los republicanos de Trump quieren tener muy claro lo que es y lo que no es norteamericano. Con este combo, se prevén cambios en la trazabilidad y sus normas.

La asociación de fabricantes americana ya ha pedido flexibilidad y tiempo. Habrá que estar atentos.

6.      Etiquetado de fechas de caducidad.

Se espera que la FDA y el USDA sigan trabajando en cambios en la legislación relativa al etiquetado de fechas, incluida la consideración seria de proponer una norma federal.

Cabe recordar que en Estados Unidos el USDA y la FDA no imponen de manera general ningún requisito estandarizado de etiquetado de fechas de los alimentos, salvo el caso de las fórmulas infantiles. La FDA no exige a las empresas alimentarias que coloquen en las etiquetas de los productos alimenticios las frases “vencido”, “consumir antes de”, “consumir preferentemente antes de” o cualquier variación de este tipo, es distinto al caso europeo que os comentamos en este artículo sobre fechas de consumo preferente y fechas de caducidad

El mes pasado, la FDA y el USDA-FSIS publicaron una solicitud de información conjunta para solicitar la opinión de las partes interesadas en relación con la estandarización del etiquetado de fechas de los alimentos, derivada de la Estrategia nacional para la reducción de la pérdida y el desperdicio de alimentos y el reciclaje de productos orgánicos.

7.      Lucha contra el desperdicio alimentario.

La lucha contra el desperdicio de alimentos también fue una prioridad en la primera administración de Trump, como se vio con la iniciativa Winning on Reducing Food Waste de 2018.

A nivel estatal, California aprobó la primera ley de etiquetado de fechas de alimentos del país, y Massachusetts tiene previsto presentar un proyecto de ley similar, pero ligeramente diferente, en 2025.

Dado el potencial de un mosaico de leyes estado por estado y el enfoque previo en el desperdicio de alimentos por parte de la primera administración de Trump, este es un tema que la FDA y el FSIS pueden abordar en el corto plazo.

8.      Aranceles encubiertos en forma de normas.

Si la política arancelaria no es efectiva, puede que Trump y los suyos opten por poner trabas burocráticas en forma de normas a las importaciones alimentarias de determinados países o conjuntos de países, como la Unión Europea. No es esperable pero tampoco descartable.

9.      Prioridades según The Human Foods Program’s 2025

El Programa de Alimentos para Consumo Humano (HFP, por sus siglas en inglés) de la FDA se lanzó solo unas semanas antes de las elecciones, el 1 de octubre de 2024, con el objetivo de centralizar y modernizar la supervisión de la seguridad alimentaria, la nutrición y las regulaciones químicas.

A principios de noviembre, el HFP publicó sus prioridades para 2025, que se centraron en la seguridad química de los alimentos, la transparencia del etiquetado y la revisión simplificada de nuevos ingredientes.

Trump ha acabado con muchos de los preceptos aprobados durante la administración Biden, no es esperable que este plan se vea afectado, pero tampoco se puede descartar nada.

10.  Reducción presupuestaria para la FDA.

Aunque no hay nada claro, los Republicanos ya han mostrado su intención de adelgazar la administración, para ello contarán con personalidades del ámbito privado como el controvertido Elon Musk. En otras épocas, sin ir más lejos, el anterior mandato de Trump, ya se produjo un recorte importante en salud pública y nutrición. ¿Volverá a repetirse la historia?

Infografía: Donald Trump y la seguridad alimentaria.

Donald Trump Seguridad alimentaria

Conclusión.

El regreso de Donald Trump a la Casa Blanca introduce un nuevo capítulo en las relaciones comerciales entre Estados Unidos y Europa. Para España, esto significa desafíos y la necesidad de adaptarse rápidamente a un entorno cambiante. La colaboración entre empresas, asociaciones y el gobierno será esencial para proteger los intereses del sector agroalimentario. Con medidas adecuadas, como un aumento de los estándares de calidad y seguridad alimentaria, que mitiguen posibles problemas como retiradas de alimentos, así como una adaptación rápida a los posibles cambios legislativos, los exportadores españoles podrán superar estas barreras y continuar posicionando sus productos en el mercado global.

Deja un comentario

Carrito de compra
Scroll al inicio

¿Quieres 10 € de descuento para cualquiera de nuestros cursos?

Suscríbete y te lo enviaremos para usar en tu próxima compra.